Feliz nochebuena para todos los lectores del blog (pocos pero escogidos ;)). Que todas las noches que nos quedan sean nochesbuenas.
24 de diciembre de 2006
20 de diciembre de 2006
Peripecias varias para adaptar vídeos al móvil
Me costó varias horas de sueño, pero al final lo conseguí: ya puedo convertir (casi) cualquier formato de video al formato 3gp para mi movil. Y bajo linux.
El principio fue fácil. Una búsqueda y bastante información al respecto, sobre todo para pasar videos a formato psp. Pero claro, como haría cualquier sistema operativo con personalidad propia, mi Debian tenía que resistirse un poco. Que sería de nosotros si saliese todo a la primera.
Como el tema de codecs, formatos y todo eso está un poco turbio en cuestiones de libertad, en los repositorios oficiales no existían los tan ansiados paquetes que necesitaba para codificar el audio. El vídeo no presentaba resistencia, pero un vídeo sin audio es como un estanque sin patos.
Se me presentaban dos opciones: una era instalar las librerias para codificar el audio en amr, dejandolo sin optimizar, y otro era buscar la manera de codificarlo en aac, que al parecer, segun me entere durante este proceso, es un tipo de compresión de audio más optimizada aún que el famoso mp3.
Pues bien, fue ahí cuando empecé a oír hablar de un tal marillat, al parecer el repositorio debian no oficial por excelencia para temas de audio-video. Raudo y veloz, incluyo las líneas mágicas en mi sources.list y hago el famoso aptitude update...El repositorio no existe. ¡Las 2 de la mañana y el repositorio no existe!
Al día siguiente (uséase ayer), ya más por cuestión de orgullo que otra cosa, seguí buscando. Resulta que el famoso repositorio marillat ahora se llama Debian multimedia, y tiene página web y unos cuantos mirrors disponibles. Lo único que le falta es una clave pública para que aptitude no tenga que preguntarme en cada actualización si quiero instalar paquetes no firmados con el riesgo que ello supone. Allí estaban los paquetes faac, faad y sus correspondientes librerías, que permiten a ffmpeg codificar el audio en formato aac para los vídeos 3gp.
Después de tantas siglas, librerías, conversores y demás, a la una y cuarto de la mañana, con más curiosidad que sueño (aunque sueño también tenía bastante), copié el vídeo transformado (un videoclip de 4 minutos) al teléfono, obteniendo una calidad de vídeo aceptable y una calidad de audio bastante buena.
Ahora sólo me queda modificar el script que hice para convertir los vídeos, y adaptar el tamaño del vídeo y algunos otros parámetros para encontrar el punto óptimo entre calidad y espacio, que en esto de los móviles no se puede desperdiciar. Cuando lo tenga, a lo mejor lo publico aquí, pero sólo si es algo medio decente, jeje.
El principio fue fácil. Una búsqueda y bastante información al respecto, sobre todo para pasar videos a formato psp. Pero claro, como haría cualquier sistema operativo con personalidad propia, mi Debian tenía que resistirse un poco. Que sería de nosotros si saliese todo a la primera.
Como el tema de codecs, formatos y todo eso está un poco turbio en cuestiones de libertad, en los repositorios oficiales no existían los tan ansiados paquetes que necesitaba para codificar el audio. El vídeo no presentaba resistencia, pero un vídeo sin audio es como un estanque sin patos.
Se me presentaban dos opciones: una era instalar las librerias para codificar el audio en amr, dejandolo sin optimizar, y otro era buscar la manera de codificarlo en aac, que al parecer, segun me entere durante este proceso, es un tipo de compresión de audio más optimizada aún que el famoso mp3.
Pues bien, fue ahí cuando empecé a oír hablar de un tal marillat, al parecer el repositorio debian no oficial por excelencia para temas de audio-video. Raudo y veloz, incluyo las líneas mágicas en mi sources.list y hago el famoso aptitude update...El repositorio no existe. ¡Las 2 de la mañana y el repositorio no existe!
Al día siguiente (uséase ayer), ya más por cuestión de orgullo que otra cosa, seguí buscando. Resulta que el famoso repositorio marillat ahora se llama Debian multimedia, y tiene página web y unos cuantos mirrors disponibles. Lo único que le falta es una clave pública para que aptitude no tenga que preguntarme en cada actualización si quiero instalar paquetes no firmados con el riesgo que ello supone. Allí estaban los paquetes faac, faad y sus correspondientes librerías, que permiten a ffmpeg codificar el audio en formato aac para los vídeos 3gp.
Después de tantas siglas, librerías, conversores y demás, a la una y cuarto de la mañana, con más curiosidad que sueño (aunque sueño también tenía bastante), copié el vídeo transformado (un videoclip de 4 minutos) al teléfono, obteniendo una calidad de vídeo aceptable y una calidad de audio bastante buena.
Ahora sólo me queda modificar el script que hice para convertir los vídeos, y adaptar el tamaño del vídeo y algunos otros parámetros para encontrar el punto óptimo entre calidad y espacio, que en esto de los móviles no se puede desperdiciar. Cuando lo tenga, a lo mejor lo publico aquí, pero sólo si es algo medio decente, jeje.
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