10 de noviembre de 2008

Por fin se acabo (A.K.A.: ya soy ingeniero)

Retomo el blog desde hace mucho tiempo ya para dar una buena nueva. Ya soy Ingeniero Técnico en Informática de Sistemas desde el día 24 de Septiembre en el que Pablo y yo presentamos nuestros Proyectos Fin de Carrera en la EUITIO. No sé para qué me sirvió, porque no cambió nada más, solamente me quité la espinita (más bien espinota, pero bueno), que tenía clavada. Aunque en realidad sólo por la tranquilidad de conciencia ya merece la pena, era algo que me debía a mí y a muchos más.
La verdad es que éste fue un verano muy duro. Desde mediados de mayo más o menos estuvimos reuniéndonos a diario para obligarnos a trabajar mutuamente, porque ninguno de los dos sacaba tiempo para dedicarle al PFC. La verdad es que esto nos funcionó bastante bien, porque el día que no tenías ganas de trabajar, como tenías que ir allí igual, acababas trabajando también. A mediados de Agosto empezamos a estirar más las tardes (hasta las 10-10.30 todos los días) y a finales de Agosto empezamos a estirar también los fines de semana. El primer fin de semana de septiembre, como ya acariciábamos el final (sólo quedaba acabar la documentación) hicimos un maratón hasta las 5 de la mañana del sábado y hasta las 3 del domingo más o menos.
Al final llegamos sobrados a encuadernar, nos sobraron 5 minutos más o menos, y más de dos horas para entregar los tomos en secretaría (si yo no sé por qué nos apuramos tanto) :-). También nos sobró un cuarto de hora más o menos desde que acabamos de codificar hasta la presentación.
Teniendo en cuenta todo esto, os podéis imaginar cómo salió la presentación. Después de toda clase de problemas de última hora, los problemas en la presentación siguieron brotando como buenas aplicaciones en fase beta (quizá beta sea mucho) que presentábamos. El resultado fue mucho mejor de lo esperado después del desastre de la presentación, nos pusieron un sobresaliente (9) y nos felicitaron por la osadía de presentar un proyecto tan ambicioso.
El caso es que ya se acabó, ahora ya no tendré que aprobar más exámenes oficiales, aunque también se acabó la buena vida del estudiante. Pero bueno, no me quejo de la parte que me toca en la vida laboral (de momento). Una pregunta típica que me hace la gente es si tengo pensado seguir estudiando. De momento no, porque además no sé lo que nos deparará el futuro con tanto ministro impresentable que hay últimamente.
Por lo demás me va todo bien. De lo que me pasó interesante hablaré o explicaré cosas más adelante, de lo que no fue interesante no merece la pena escribir. Como resumen, decir que Pedricera ya está en su nueva casa muy feliz, ya tiene una caseta y todo, que la moto estuvo todo el verano de vacaciones en Galicia, en el taller, y que estuve de vacaciones con Euge en Lanzarote a principios de verano y lo pasé de vicio por allí.